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| Foto de Pulpolux vía Flickr |
Epicteto fue hijo de esclavos. Su primer dueño le propinaba terribles palizas. Con el segundo propietario tuvo más suerte, era persona ilustrada y permitió que asistiera a clases callejeras de filosofía. Poco a poco fue desarrollando un pensamiento propio que le ayudó a encontrar la felicidad, a pesar de ser pobre, no tener familia y estar privado de libertad.
Epicteto aprendió a superar las adversidades desarrollando una actitud resiliente. Como esclavo podía ser sometido, humillado, torturado... no tenía poder sobre nada de lo que acontecía a su alrededor. Sin embargo era el rey de su mundo interior. Si él no lo permitía, nada podía alterar sus pensamientos y convicciones.
Mucho después, Stefan Vanistendael sistematizó las ETAPAS PEDAGÓGICAS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA RESILIENCIA, a través de una acertada analogía de la que toma nombre su teoría: "La casita resiliencia".
Yo soy
Toda construcción precisa de un solar, y NO sirve cualquier superficie, necesitamos un suelo firme. En el desarrollo de la resiliencia, la base son las necesidades que Maslow identifica en el nivel inferior de su famosa pirámide. Sin alimento, descanso o ropa no hay construcción posible. Ni el propio Epicteto pudo ser resiliente con su primer dueño.
Una vez preparado el suelo se pueden poner cimientos, que equivalen a la aceptación personal y a la formación de una red de apoyos (familia, amigos). Es la primera gran etapa de esta construcción.
Yo tengo
El primer piso albergará la capacidad para soportar un terremoto (lo que nos ocurre) sin que nuestra casita se hunda. Una segunda planta supone ir más allá, dotando de significado a los acontecimientos para que nos beneficien. Es la fase en la que "yo tengo" la capacidad de reinterpretar el "por qué". El sentido del humor, la autoestima o relativización serán esenciales para trabajar esta etapa de la construcción.
Yo puedo
El tejado es el final de la obra. La culminación de la actitud resiliente sería la apertura a nuevas experiencias, el abandono de la zona de confort para ser mejor profesional, mejor alumno... MEJOR PERSONA.
El ejemplo de vida de Epicteto y sus ideas fueron tan valiosas que el mismísimo Adriano, emperador de Roma, hizo un largo viaje para escuchar al ya anciano maestro. Él construyó su casita y ¡TÚ TAMBIÉN PUEDES!
Interesante percepción.
ResponderEliminarSi tienes necesidades básicas cubiertas, como el comer y ropa al menos, que son imprescindibles junto con alguna más si fuera posible, también estás más tranquilo y aguantas algo más, porque es que sin estas no puedes vivir y afecta a la cabeza a los pensamientos de manera negativa. Todos los elementos estarían a favor para que te rindieras.
ResponderEliminarY es cierto que el desarrollo intelectual te hace ver las cosas de otra forma y también cómo tomarte las cosas. Pienso que positivamente en principio, pero cada uno puede pensar sus teorías a partir de sus conocimientos enfocadas en cualquier dirección, por lo que puede que sea negativo, aunque tiendo a pensar que una minoría de casos, si así fuera.
EL DESARROLLO DE LA RESILIENCIA ES MUY IMPORTANTE EN EL SER HUMANO. EL SER CAPAZ DE CONTROLAR TU MUNDO INTERIOR Y SER CONSCIENTE DE QUE SOLO TÚ ERES DUEÑO DE TU MISMO ES MUY IMPORTANTE.
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ResponderEliminarCreo que no es fácil tener una actitud resiliente. Es una cuestión de aprendizaje y trabajo duro porque ante las adversidades que nos da la vida, lo más fácil es desanimarse y venirse abajo, además de autolamentarse.
ResponderEliminarConsidero importante aprender a construir esta "casita de la resilencia" desde que somos pequeños porque así, a la hora de la verdad, podremos afrontar de mejor forma el bache por el que estemos pasando.
Desarrollar la resilencia es caminar en nuestro desasrrollo optimo como personas. Somos animales sociales, nos construimos en un entorno social. Somos una individualidad en un conjunto, pero somos un conjuto de individualidades y todas ellas en constante interacción. Otros dependen de nosotros, de nuestras capacidades para superar retos y nosotros dependemos de otros. La resilencia es una capacidad clave, que podemos y debemos desarrollar. Lo hacemos de una forma natural, pero es un proceso que se puede mejorar gracias al trabajo individual y en equipo. La escuela y la familia son los principales agentes en este desarrollo ofreciendo las herramientas que nos ayudan a afrontar la vida. Somoms personas que buscamos ser mejores personas y eso está en nuestra naturaleza.
ResponderEliminarCreo que es muy importante que cada uno de nosotros pueda llegar a construir su casita para poder desarrollar algo tan trascendental como es un pensamiento propio, aceptarse a sí mismo, tener autoestima, sentido del humor, relativización y la formación de una red de apoyos. Pienso que tenemos que tener la posibilidad de desarrollar la capacidad de ver las cosas desde el punto de vista menos perjudicial para nosotros. En definitiva, es muy importante desarrollar la resiliencia para conseguir todo aquello que nos propongamos. Para ello, la escuela es una de las fuentes que nos tiene que brindar esta posibilidad de llevar a cabo este desarrollo. Creo que es fundamental que cada uno tenga el poder de mandar sobre sus pensamientos y convicciones, si esto no se llega a desarrollar seremos personas muy vulnerables.
ResponderEliminarNo conocía la pirámide de Maslow y me ha parecido además de súper interesante,super real.
ResponderEliminarCuando las personas no tenemos nuestras necesidades básicas satisfechas, no somos capaces de avanzar, de pensar en otra cosa y nos sentimos frustrados. Sin embargo, cuando comemos bien, respiramos, estamos tranquilos y satisfechos, la vida fluye. Somos capaces de relacionarnos, de transmitir nuestra alegría y de pensar en metas futuras.
El ser humano es básico y necesita comer y dormir para afrontar la vida positivamente.
El contenido de la pirámide de Maslow es un aspecto fundamental que he analizado en diferentes cursos de mi escolarización, es una explicación sobre la motivación de los seres humanos. Para alcanzar nuestros objetivos es necesario cubrir nuestras necesidades básicas e ir subiendo escalores para envolverse en las exigencias personales.
ResponderEliminarLa resilencia es un aspecto beneficioso para nuestro desarrollo óptimo como seres humanos, considero que en la escuela no nos han enseñado ni educado para formar la casita de resiliencia. Debemos ser mejores personas en todo momento y no ser conformistas, sino siempre intentar sacar lo mejor de nosotros mismos.
Hoy en día tener una actitud resiliente puede ser muy beneficioso para tu éxito tanto profesional como en cualquier ámbito de la vida. Afrontar las dificultades de una forma sana puede hacerte crecer como persona y salir fortalecido de las adversidades.
ResponderEliminarLa resiliencia es un término que se refiere a la capacidad que tienen las personas de superar situaciones que no son agradables para ellos. Cuando una persona es resiliente es difícil que le cambie sus pensamientos y visiones ya que tiene sus valores muy claros y marcados.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista, la resiliencia o capacidad de adaptación es un punto a tener en cuenta en cuanto a la educación en valores de nuestro alumnado. Como profesores/as tendremos la oportunidad de aportar nuestro granito de arena para la construcción de la casita resiliencia de nuestro alumnos/as haciéndoles comprender que en la vida lo importante no son los hechos o circunstancias que nos ocurren, lo verdaderamente importante es el cómo interpretamos lo que nos ocurre.
ResponderEliminarLa vida esta formada por altos y por bajos. Debemos enseñar a nuestros alumnos/as a mirar las circunstancias de manera positiva con una mirada amable, sabiendo que al margen de las circunstancias, mejores o peores, nuestra actitud ante las mismas será lo más importante si queremos aprender y crecer personalmente.
La resiliencia es una capacidad que hay que desarrollar en los niños creando el contexto y procurando las experiencias necesarias para que lo alcancen. La pérdida del miedo al fracaso, el incremento de la autoestima, facilitar experiencias de éxito, etc., son elementos necesarios para que las personas vayan creando seguridad en sus capacidades y les permita recuperarse y superar las adversidades de una manera eficaz.
ResponderEliminarUn niño con buena autoestima podrá transformarse en un adulto con buena capacidad de resiliencia, por tanto desde pequeños es bueno guiarlos transmitiendo comprensión, buen humor, ayudándolo a aceptarse, a confiar en ellos mismos en su primera etapa para que puedan desarrollar una forma constructiva pudiendo enfrentarse a las diversas circunstancias de la vida sin sufrir un daño grave y profundo.
ResponderEliminarEl tener una actitud resiliente es, bajo mi punto de vista, lo probablemente más complicado de conseguir pero, al mismo tiempo, lo más valioso una vez que se consigue. Vivimos en un mundo materialista y capitalista donde se suele confundir la calidad de vida con el nivel de consumo y la felicidad suele achacarse a cosas materiales cuando es totalmente lo opuesto. La felicidad está en ti, la creas tú y al conseguir llegar a un punto de resiliencia y aceptación es mucho más fácil alcanzarla. La vida se compone de momentos altos y bajos y si aprendiéramos a simplemente aceptarlo, intentar ver qué podemos aprender con eso y qué cosas se pueden mejorar a través de ahí, los bajos serían probablemente mucho menos bajos.
ResponderEliminarVolvemos a ver la influencia de tener las necesidades básicas cubiertas como clave para poder conseguir un buen aprendizaje. Además, se añade la búsqueda de sentido a lo que hacemos. Estoy de acuerdo con el texto, puesto que si carecemos de lo esencial para vivir no nos preocuparemos por los siguientes escalones de la pirámide. Cuanto mejor construidos estén los cimientos y los pisos que le siguen, más conseguiremos centrarnos en aprender. Pero además tenemos que plantearnos unos objetivos para no perder el interés en lo que estamos haciendo. Pienso que la escuela debería incentivar a los alumnos a marcarse unas metas para dar sentido a lo que se estudia día a día.
ResponderEliminarEntiendo entonces la resiliencia, término que me era desconocido hasta ahora, como la capacidad de superar situaciones adversas. Pues esa capacidad de reaccionar ante diferentes problemas, y saber cuidar de uno/a mismo/a me parece fundamental. Pienso que el hacerse fuerte como persona y tener unos valores, harán de ti una persona que sepa desenvolverse en diferentes entornos. Una buena autoestima es fundamental. Atraer pensamientos positivos te hará responder ante situaciones de forma que ya has dado el primer paso a la hora de afrontarlos.
ResponderEliminarMe agrada haber aprendido un poco más de la resiliencia, que conocía poco hasta este momento, y descubierto la analogía de Stefan Vanistendael que me parece de lo más adecuada para ayudar a la comprensión de este término y los pasos a seguir para poder decir que se tiene una verdadera actitud resiliente que nos ayudará a mejorar como individuos y a enfrentarnos a todo lo que se nos ponga en el camino pudiendo controlar mejor nuestras emociones y resultados. Si bien, a primera vista puede parecer algo difícil de alcanzar y que puede verse muy afectado por las experiencias negativas que nos encontremos a lo largo de la vida, creo que la resiliencia nos ayudaría a superar esas adversidades y seguir adelante con menos esfuerzo cada vez.
ResponderEliminarEn mi opinión, es fundamental introducir, hoy día, en la enseñanza las etapas pedagógicas para la construcción de la resiliencia. Me parece igual de importante que las matemáticas o la lengua ya que, a largo plazo, supondría enseñar al niño a ser feliz en la vida y, por tanto, tendríamos más adultos felices. La resiliencia nos ayuda a superar los obstáculos que nos plantea la vida para así poder terminar siendo felices, a pesar de los problemas que nos surjan. El claro ejemplo es el del esclavo que cita el texto, que consiguió aplicar el método eficazmente y así poder sobreponerse a su situación.
ResponderEliminarSe debe enseñar al niño que ha de construir "la casa" con todos los pisos (autoestima, aceptación personal...), el resultado serán adultos mejores y más felices. Y es que, como se dice, la educación es el arma más poderosa para poder cambiar el mundo.
ResponderEliminarAprender a luchar contra las adversidades que la vida nos pone en nuestro camino, no es una tarea fácil. Por ello, la actitud resiliente puede proporcionarnos la clave para poder logarlo. En el texto se habla sobre Stefan Vanistendael y sus etapas pedagógicas para la construcción de la resiliencia, explicadas en una fantástica analogía. Estas nos muestran aquellas actitudes y comportamientos que debemos poseer para encontrar nuestra felicidad, siendo clave el desarrollo de la autoestima. El objetivo es encontrar la mejor versión de uno mismo, unido a una felicidad plena. Si Epicteto consiguió realizarlo, todos deberíamos poder lograrlo, solo tenemos que plantearlo y hacerlo realidad.
Son tres aspectos importantes los expuestos para conseguir un desarrollo personal satisfactorio, lo cual no resulta fácil. En mi opinión se necesita de mucha maduración personal y sobretodo entender que todo es una cuestión de actitud.
ResponderEliminarEn la propia historia se observa como la adquisición de un pensamiento filosófico posibilita el avance del personaje hacia esa visión, por lo tanto la adquisición de conocimiento es fundamental para el desarrollo madurativo de la persona, la cual tiene que contar con motivaciones, que, como se observa en la historia, no deben ser exclusivamente externas, sino internas.
La historia de Epicteto es ejemplar para cualquier persona ya que nos muestra como la felicidad, solo nos las podemos proporcionar nosotras mismas (las personas), sin importar la situación en la que nos encontremos. El escrito explicita de forma clara como llegar a construir una buena casita de la resiliencia en cada una de nuestras vidas. Las etapas pedagógicas para la construcción de la resiliencia me la anoto para realizar como actividad en algún momento con mi alumnado, ya que le encuentro muchas formas de aplicación. Gracias, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarLa resiliencia se trata de un aprendizaje que puede darse durante toda la vida y, más allá de las particularidades de cada uno, todos podemos aprender a ser resilientes. Y de la misma forma, todos los niños, independientemente de que estén inmersos en problemas o no, pueden beneficiarse de los programas educativos que promuevan la resiliencia, capacidad imprescindible no sólo para el desarrollo exitoso del alumno sino también del docente (Jesús, C. Guillén).
ResponderEliminarNo conocía este término hasta ahora y me ha gustado aprenderlo. El hecho de enseñar a los niños/as a construir su propia 'casa' en la que aprenden en creer en sí mismos y autoacerptarse entre otros, es muy importante para que sean unos adultos inmejorables y puedan sacarse partidp al máximo a sí mismos.
ResponderEliminarCreo que la resilencia, aunque desconocida para muchos por esta denominación, viene siendo desarrollada por la humanidad desde siempre. El ser humano es ante todo un superviviente que se crece ante la adversidad, sin embargo, esta no es una característica que posean todas las personas; la autoestima, el espíritu de lucha, el buen humor, la esperanza, etc., una vez cubiertas las necesidades básicas, son algunos de los dones necesarios para poder desarrollar una actitud resilente.
ResponderEliminarPara los que no tienen la suerte de nacer con estas herramientas, creo que la escuela cumpliría una función fundamental para llevar a cabo este desarrollo de los individuos, al fin y al cabo, se trata de formar a las personas ¿Por qué no hacerlo en toda su extensión?
Creo que debe ser tarea de la familia y de los educadores transmitir una actitud positiva ante la vida, enseñar a interpretar las situaciones difíciles con esperanza y optimismo, ya que de nuestra actitud ante las circunstancias dependerá el saber solventar las dificultades, aprender, crecer como personas y, en definitiva, ser felices y sacarle el mejor partido a nuestra existencia.
La resiliencia es entendida como aquella capacidad que presentan las personas de adaptarse a las adversidades, traumas, problemas, tragedias que aparecen en su vida. Se ha comprobado que la mayoría de las personas presentan resiliencia y así lo muestran estudios que han investigado las respuestas de personas que vivieron los ataques terroristas del 11S en EE.UU. Estas a pesar de lo vivido hicieron grandes esfuerzos para volver a encauzar sus vidas.
ResponderEliminarAsí como dice la pirámide de Maslow, los humanos funcionamos en base a nuestras necesidades, nuestra motivación es cubrirlas. Y Epicteto, de una forma u otra busca también cubrir sus necesidades aunque eso tenga que ser de forma intrínseca, se adapta a lo que hay, tiene capacidad de resiliencia.
ResponderEliminarEn la naturaleza sobreviven los que se saben adaptarse al medio, con sus modificaciones y cambios inesperados. El ser humano tiene la capacidad de una mente flexible pero para que sea verdaderamente resiliente debe trabajarse desde edades tempranas.
ResponderEliminarTal y como decía Francis Picabia nuestra cabeza es redonda para permitir a las ideas cambiar de dirección, tenemos que tomar conciencia de los beneficios de la flexibilidad mental y trabajar desde pequeños en lo que yo llamo la humildad de pensamiento, el que no siempre tenemos la razón y lo aceptemos de buen grado para seguir aprendiendo y mejorando.
No dominaba este término y me ha parecido muy enriquecedor conocerlo. Estoy totalmente de acuerdo con que hay que tener una base muy sólida sobre la cual crecer, como dice el texto, para poder construir cada uno su casita. El tener una actitud resiliente puede llegar a ser complicado, cada persona basa su felicidad en diferentes cosas y lo difícil está en hacer ver que lo más importante está en el interior de cada uno, la felicidad está ahí, y es todo lo que se necesita para superar los obstáculos que vayan surgiendo a lo largo de la vida.
ResponderEliminarGran lectura, desconocía la explicación de la casita de la resiliencia. Sin duda alguna me quedo con ganas de saber mas y profundizaré la lectura
ResponderEliminarLa resiliencia parece innata en el ser humano, donde el instinto de supervivencia es natural y donde debe poder ser capaz de satisfacer las necesidades vitales y superar las adversidades para sobrevivir.
ResponderEliminarPero en una sociedad (nuestra sociedad) en la cual las necesidades vitales están generalemente cubiertas, las aspiraciones de superioridad estimulan esta resiliencia. Vivimos en una sociedad donde la competitividad está a la orden del día.
Dicha capacidad humana, sin embargo, requiere un trabajo intrapersonal constante. Difícil a veces de mantener, pero muy satisfacctorio si se consigue lograr.
La resilencia es algo que debemos fomentar en nuestro alumnado para que sean ellos mismos los que resuelvan sus propios problemas y sean capaces de superar las adversidades.
ResponderEliminarCuriosa lectura, como en algún comentario que he leído, me ha recordado al leerla a la pirámide de Maslo, pero en vez de una pirámide de necesidades. Una casa donde podamos construirnos a nosotros mismos. Aunque la resiliencia ha existido siempre, me parece genial ideal que este término se trabaje en las aulas. Los alumnos y alumnas tienen que entender que el mundo que les depara fuera no es tan sencillo, pero que conociendo sus debilidades y fortalezas y trabajando en ellas pueden superar cualquier obstáculo por grande o complicado que pueda aparecer.
ResponderEliminarLa Resiliencia es un concepto que últimamente se escucha mucho pero no sé si llega o no a las aulas. Con La casita Resiliencia, proporcionamos al alumnado las pautas que han de seguir para construir la mejor versión de ellos, capaz de afrontar cualquier problema y adversidad por sí mismos. Así, comprenderán que son ellos quienes tienen que ir adaptándose al medio que les rodea, superando los obstáculos y mejorando como persona.
ResponderEliminarYo soy, yo tengo y yo puedo
ResponderEliminarLos mejores tres pasos para ayudar a nuestro alumnado sin duda.
Con esta herramienta podemos crear actividades o talleres para ayudarles a conocerse, a que sean capaces de sacar toda su luz fuera y que se lo crean.
Hagamos de nuestro alumnado personas felices para que tengamos unos ciudadanos felices e involucrados con los suyos.
Los tres pasos descritos en el artículo son las pautas que se deben de seguir para que seamos capaces de enfrentarnos a cualquier situación que se presente. Los alumnos tienen que construir su propia casita, para poder superar las adversidades e ir contruyendo una mejor persona que sea capaz de dar lo mejor de sí mismo.
ResponderEliminarMuy interesante, aunque ser capaz de controlar tu mundo interior es bastante difícil, ya que hay muchos factores externos que pueden llegar a impedirlo. Aun así, es cuestión de trabajarlo empezando por la base (el suelo de la casita resiliencia) hasta llegar al “Yo puedo”.
ResponderEliminarLa opinión que me supone las líneas escritas me genera cierta confusión. Por un lado, la resiliencia es la capacidad que tiene una persona de sobrevivir a duras circunstancias en la que incluso su vida puede llegar a verse comprometida. Un ejemplo de esto, pueden ser las guerras que padecen muchas personas en ciertos países o lo vivido por Epicteto, y pese a ello continuar con sus vidas siendo felices y sin resentimiento. Pero… ¿Es posible que una persona pueda llegar a ser resiliente sin haber vivido una situación traumática? Es evidente, que desde nuestra posición de docentes podemos ayudar al alumnado a que construya ciertos aprendizajes que sin duda van a influir de manera positiva en la manera como se enfrenta a la vida. Sin embargo, no será hasta que se enfrente a situaciones de riesgo que se podrá comprobar su capacidad de resiliencia.
ResponderEliminarEl único soporte que tenemos es la propia convicción por mejorar día a día, la superación de los obstáculos que se presentan nos hacen crecer y creer en nosotros mismos, la educación es sin duda una herramienta vital para la construcción de una casa de conocimiento habitable.
ResponderEliminarNo estoy totalmente de acuerdo con la afirmación de que la base inferior de la pirámide de Maslow tenga que estar satisfecha para que una persona sea resiliente. Algunas de las personas más resilientes que he conocido en mi vida no tenían absolutamente nada. Claro que no es algo que se puede soportar por mucho tiempo pero la verdad es que he visto más resiliencia en situaciones de emergencias que en otras partes, donde las necesidades básicas estaban cubiertas y otras también.
ResponderEliminarYo soy, yo puedo y yo tengo. 3 afirmaciones que deberíamos hacer llegar a nuestro alumnado para crear seres resilientes. Al igual que afirma Inma en su comentario, no tengo la certeza de si la resiliencia es trabajada en el ámbito educativo; aún así, es un concepto que se debe trabajar ya que de esta manera, formaremos a individuos capaces de afrontar distintas situaciones adversas que le sucedan en su día a día.
ResponderEliminarMaria del Carmen Llanos Garcia
ResponderEliminarEl tema de la resiliencia está dejando de ser un tema emergente para convertirse en un tema central en los campos de la psicología y aun mas en una disciplina tan importante, como la pedagogía, la resiliencia debe ser abordada especialmente en todos los contextos de la vida.
Del mismo modo que la inteligencia emocional es un pilar básico para el bienestar de una persona pienso que la resiliencia lo es también. Deberíamos ser enseñados en el colegio que ser capaz de encontrar felicidad ante la adversidad es algo que todos podemos hacer. Uno de los aspectos más importantes para esto es tener un buen círculo o red de apoyos que nos ayude en momentos en los que nuestra autoestima personal nos falle. Aparte del apoyo de otros, es muy importante que a través del autoconocimiento forjemos una relación de confianza en nosotros mismos de tal modo que si se nos presenta algún problema mayor, nuestra capacidad para no hundirnos y salir a flote sea nuestra arma más poderosa. Solo con una buena base personal y familiar se puede lograr esa resiliencia.
ResponderEliminarConsidero la resiliencia uno de los aspectos dentro de la inteligencia emocional que debe ser desarrollada durante etapa educativa del ser humano, sin embargo tal como explica el post, es necesaria una base sólida, una base de aspectos básicos para la vida (alimento, descanso, ropa) los cuales están relacionados con la situación económica por lo que es necesario que exista un estado que asegure a toda la población esa base fundamental de la que parta el desarrollo educativo de los niños.
ResponderEliminarDel mismo modo que nunca se puede empezar una casa por el tejado, con la construcción de la personalidad ocurre lo mismo. Si lo extrapolamos a la educación, deducimos que es de vital importancia dotar a los alumnos de las herramientas necesarias para que consigan consolidar los pilares fundamentales de su vida, que les permitirán desarrollarse como personas en una sociedad a veces llena de injusticias. Por tanto, la clave para construir unos alumnos con criterio propio se llama resiliencia y es la que nos permite desarrollar valores que nos invitan a ser mejores personas y poner solución a los problemas que nos plantea la vida.
ResponderEliminar¡Me ha encantado conocer la sistematización de las etapas pedagógicas que realizó Stefan Vanistendael para la construcción de la resiliencia! Creo que explica muy bien el proceso que ha de seguir cada uno para desarrollarse adecuadamente, empezando por la aceptación personal y acabando con la superación de miedos, consiguiendo así la resiliencia necesaria para afrontar la vida de la mejor manera posible.
ResponderEliminarLa historia es muy motivadora, y estoy en absoluto acuerdo con ella; Fuera puede ser un caos, pero dentro soy libre. Ahora bien, teniendo en claro esto ,¿ qué es exactamente esta resiliencia? He echado de menos una definición.
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