Educar el talento

Foto de Leo Hidalgo vía Flickr

El talento es el buen uso de la inteligencia... Es la inteligencia que triunfa. José Antonio Marina

Mark Zuckerberg, Sergey Brin (co-fundador de Google), Lady Gaga... Todos fueron alumnos superdotados, y todos pasaron por el centro para jóvenes con talento de la Universidad John Hopkins de EE.UU. Uno de sus profesores, Julian C. Stanley, aprovechó su contacto con el talento para llevar a cabo un ambicioso estudio: analizó la trayectoria de 5.000 superdotados durante 45 años (el estudio continúa en la actualidad a cargo de Camilla Benbow y David Lubinski, con el título: The Study of Mathematically Precocious Youth).

El conocimiento generado a lo largo de tantos años de investigación se ha sintetizado para la revista Nature, y de esa publicación científica emanan las siguientes RECOMENDACIONES PEDAGÓGICAS para educar a jóvenes con talento:

  • Exponerle a EXPERIENCIAS DIVERSAS. 
  • Dar opción a que profundice en sus INTERESES. 
  • No olvidarse de sus necesidades EMOCIONALES. 
  • Animarle a asumir riesgos y a explorar más allá de la zona de confort. 
  • Ayudarle a entender que los FRACASOS son parte del aprendizaje. 
  • Colaborar con la escuela, ¡formamos parte del mismo equipo!

Criar un genio es lo último que aconsejaríamos a los padres, ese objetivo puede dar lugar a todo tipo de problemas sociales y emocionales. Camilla Benbow

23 comentarios

  1. Igual que en el texto de la diversidad habla de personas especiales, es verdad que hay más personas que también son especiales en otro sentido y me parece razonable que se les dé una educación especializada, ya que pueden ser un motor para la mejora de la sociedad muy potente.
    Con esto no me quiero contradecir con el comentario anterior y estas personas privilegiadas intelectualmente también pueden compartir el aula con otros compañeros para aprender esa empatía, responsabilidad, solidaridad, etc de la que hablábamos. Pero claro, igual habría que individualizar un poco, porque para los alumnos no privilegiados intelectualmente sería terrible quizás seguir las clases y no les vendría del todo bien.

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  3. Desde mi punto de vista, el tema de como educar y tratar a un niño con altas capacidades es bastante desconocido para muchas personas. Normalmente nos centramos en niños con problemas de aprendizaje pero no se suele dar importancia a los niños superdotados y, aunque no lo parezca, estos tampoco lo tienen fácil en clase. Pienso que es un tema en el que conviene profundizar.

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  4. Cuando nos referimos a necesidades educativas especiales, siempre imaginamos el caso de un niño que necesita más atención porque lleva un retraso en el aprendizaje o algo parecido. Pero muy pocos pensamos en los niños con altas capacidades. Esos niños tienen unas necesidades educativas especiales, ya que van más adelantados que el resto de la clase. Estos niños deben ser tratados de manera que desarrollen su potencial intelectual y su potencial emocional, ya que sienten tanta presión por lo que se espera de ellos que un pequeño fracaso puede dar lugar a un gran sentimiento de decepción y fracaso en el niño.

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  5. El talento lo considero como el resultado de un largo y duro aprendizaje, tras un esfuerzo se consigue el talento por tanto lleva un trabajo detrás. Todos tenemos talentos ocultos diferentes a los demás dependiendo de la parte que nos interese más a nosotros y por tanto la hayamos trabajado más.

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  6. MARIA DOLORES GONZÁLEZ PÉREZ2 de noviembre de 2018, 9:58

    Las recomendaciones pedagógicas para educar a jóvenes con talentos, en mi opinión, deberían ser las mismas que para cualquier alumno/a. Exposición a experiencias variadas, profundizar en sus intereses, educar la parte emocional ..., no veo dónde debería estar la diferencia con respecto a la recomendaciones pedagógicas para el resto del alumnado.
    Creo que la diversificación debe implicar normalización (¡ojo, no es lo mismo que estandarización!). Lo que intento explicar es que entiendo que la normalización lleva aparejado la aceptación de lo diferente, lo cual, no esta reñido con la adecuación en cuanto al grado o a las dosis que cada cual necesite en cada una de las parcelas o ámbitos educativos. Debemos ser capaces de convivir juntos, lo que nos enriquecerá a todos/as, pero eso no significa que estandaricemos la educación y que no cubramos las necesidades individuales de lo alumnos/as.

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  7. Al igual que en las aulas nos podemos encontrar con niños con necesidades especiales también nos podemos encontrar con niños con talentos. Creo que, al igual que en el artículo anterior, puede ser muy beneficioso para todos trabajar con estos niños con talentos y que pueda haber un intercambio de ideas entre todos los compañeros, sin olvidar nunca que cada niño es único y que hay que atender a la diversidad. Pienso (aunque con mucho desconocimiento) que a los niños con talentos se les debería cambiar la idea que pueden tener acerca de que siempre tienen que intentar obtener los mejores resultados, pienso que esto haría que no se pasaran toda la vida frustrados intentando dar lo mejor de sí para no defraudar a nadie.

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  8. Rafael E. Reigal Garrido4 de noviembre de 2018, 17:55

    Este tipo de alumnos muchas veces pasa desapercibido en las escuelas o no se sabe muy bien cómo actuar con ellos. Cada vez más existen recursos para identificarlos y ayudarles a encontrar su camino, porque muchas veces tienen dificultades para avanzar. En general, hay que potenciar sus capacidades, animándoles a que exploren las posibilidades que puede abrirles sus competencias, permitiéndoles alcanzar los objetivos que se propongan. Realmente, se trata de alumnos con necesidades educativas especiales, a los cuales también hay que darles mucho cariño y otorgarles dedicación. En ocasiones se puede frivolizar sobre las discrepancias existentes entre una evaluación psicopedagógica de este tipo y sus resultados académicos, pero es que no dejan de ser niños que requieren atención y ayuda para gestionar su forma de ver y entender el mundo.

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  9. Es bien sabido, que esos chicos/as con un gran talento, que son superdotados, que tienen una inteligencia superior, destacan en las aulas, lo que conlleva un aprecio y admiración por parte de los compañeros/as y profesorado, pero también alguna que otra muestra de envidia o reproche. Esto último debería ser cambiado. Merecen un trato igual, ellos trabajarán acorde con sus necesidades, pero todos los compañeros, ya sea por esta diferencia o por cualquier otra, deben compartir un compañerismo, eso hará que el colectivo funcione mejor.
    Otro aspecto a tener en cuenta es la presión a la que se somete a este alumno/a por el hecho de exigirle más. Éste se puede sentir presionado/a, y puede mostrar cambios emocionales.

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  10. Me parece que volvemos a lo mismo que en el texto anterior sobre la diversidad en el aula, pero del lado contrario. En este caso, la pregunta es qué hacer con los aventajados. Si buscamos una escuela donde se potencie el trabajo en grupo, donde todos se beneficien de todos, ¿se acabarán aburriendo los más aventajados? Me parece un tema interesante. Supongo que lo ideal sería potenciar tanto el conjunto como al individuo, ofrecer una base común y a partir de ahí explotar el talento de cada persona. Sin embargo, sigo siendo algo escéptico con este tema.

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  11. Sinceramente, este es un tema que se escapa a mi conocimiento por lo que debería informarme y formarme más.
    Creo que los alumnos con altas capacidades no son los primeros que se nos vienen a la cabeza cuando pensamos en alumnos de educación especial. Es cierto que es menos común en las aulas tener a alguien superdotado, pero es evidente que los docentes debemos estar preparados para poder satisfacer las necesidades de estos alumnos y ayudarlos en su desarrollo.
    Creo que de vez en cuando están bien las actividades en grupo de estos alumnos superdotados con el resto de sus compañeros, pero pienso que la mayoría de las veces deben tener una educación más centrada en sus capacidades.

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  12. La diversidad llega a los extremos, tanto por el lado bueno como por el no tan bueno. Y es muy importante estar preparado para todo tipos de alumnos, pues de eso se trata, que saquemos lo mejor de cada persona y por supuesto trabajar también la cooperación con los demás.
    No obstante pienso, que para aquellos que no tienen capacidades tan altas se deberían utilizar métodos parecidos, pues todos necesitan de experiencias nuevas, de hacerlos fuertes y hacerlos creer en sí mismo, y sobre todo ayudarles a sacar sus intereses, cosa que quizá la mayoría no tenga tan fácil y claro.

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  13. Me parece de gran interés esta publicación, ya que siempre que hablamos de una educación específica nos referimos al alumnado con trastornos y no a este grupo de alumnado con altas capacidades. Por otra parte, me parece lamentable la formación a futuros docentes por parte de la universidad, considero que la mención de inclusiva debe ser una mención obligatoria para todo el profesorado. Todos deben conocer las características y peculiaridades de los niños y niñas especiales.

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  14. Me parece muy interesante este artículo. Cuando se habla de "educación especial" o "específica" nunca pensamos en el alumnado de altas capacidades, sino todo lo opuesto, dejando fuera de nuestros pensamientos a este colectivo, siendo igual de importante. Tanto padres como docentes deberían tener una mayor formación e información sobre este tipo de pedagogías para poder afrontar y potenciar las y peculiaridades capacidades "no comunes al resto" que poseen estos niños.

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  15. Es interesante saber que existen escuelas para jóvenes con talento y que personas como Lady Gaga sean superdotados, pero me quedo con la última frase que cierra este post: "no debemos intentar ser los mejores, debemos sacar lo mejor de nosotros mismos". Sin más, me ha encantado.
    No es un secreto que hay verdaderos talentos televisivos que cuando les hacen entrevistas o se encuentran con fans por la calle, no tardan en demostrar las horribles personas que son. Mostrándose déspotas e insufribles con personas que solo se interesan por ellos o les muestran su admiración.
    Yo no quiero ser famosa ni la más inteligente, quiero ser lo mejor que puedo llegar a ser. Es la frase definitiva.
    Todos tenemos mucho potencial que no sacamos completamente al exterior, a veces por vergüenza o temor escondemos una parte hermosa de nosotros o muy beneficiosa para todos.
    Me parece genial educar a un superdotado, pero creo que lo esencial es educar personas, humanos íntegros que respeten la diversidad y la diferencia, que sepan que nadie es más que otro, que solo deben aspirar a ser lo mejor que puedan ser.

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  16. Beatriz García Martín7 de noviembre de 2018, 18:09

    Pienso que todas las personas tienen talento, pero en muchas ocasiones no logran potenciarlo. Por ello, es importante que el docente logre identificar este y le ofrezca las herramientas necesarias para lograr desarrollarlo.
    Por otro lado, es cierto que existen personas que destacan más allá del talento siendo unos absolutos genios, catalogados como superdotados. En ocasiones estos no son encaminados de forma correcta, por lo que veo muy importante que el docente se forme y conozca este tipo de alumnos .Con las recomendaciones pedagógicas que nos indica el texto podemos conocer actuaciones interesantes.

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  17. Gracias, anoto sugerencias de las pedagogías de la revista nature y leer el estudio sobre el seguimiento los superdotados en EEUU. Parece que, aunque cada vez menos, cuando nos enfrentamos al caso del alumnado con altas capacidades intelectuales, este no necesita tanto apoyo. Cuando está dentro tipo que tiene unas necesidades específicas de apoyo educativo y necesitas de programas específicos, como más control de que pensamos porque ese “talento” podría también, así ha pasado en muchos casos, acabar bastante mal a nivel personal y/o escolar/laboral.
    De lo que yo he podido extraer de mi escasa experiencia, lo que más me ha llamado la atención es la dificultad en la gestión de las emociones e identificarlas en otras personas, además que les cuesta prestar ayuda al que menos “sabe” o más le cuesta. Por eso sería dos los puntos fuertes a mejorar.

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  18. Este post refleja un caso muy parecido al anterior, se trata de personas que se salen fuera de lo "normal". Para la sociedad eso es un problema, y por tanto para el joven también. Socialmente se observa como típico que tenemos miedo a lo diferente.

    Realmente pienso que todos somos diferentes, pero la socialización nos hace parecer semejantes a los demás. Y cuando observamos alguien más excéntrico tendemos a alejarnos, aunque sea, como en este caso, un joven con más capacidades.

    La escuela es un lugar privilegiado para aprender de lo diferente y reconocernos todos diferentes, pero a la vez iguales

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  19. Conviene profundizar en el tema, ya que hay una carencia de conocimientos en cuanto al tema, en mi opinión. Estamos tan centrados en detectar y apoyar los trastornos perjudiciales que se nos olvida que los niños y niñas con ALCAIN también entran en el grupo de Necesidades Específicas.

    Es parte de nuestra labor cubrir las necesidades de todo el alumnado en base a sus capacidades y a sus necesidades, por lo tanto, los detalles especificados para los alumnados con ALCAIN me supone un nuevo conocimiento.

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  20. Existen muchas investigaciones, artículos y documentos informativos a cerca de la superdotia, o personas talentosas, cómo tratarlos y de que manera generar inclusión en clase desde la propia diversidad a la que se exponen.
    Desde mi humilde opinión, creo que todas las personas tenemos talento inmerso en nuestro interior, la clave está en saber explotarlo y sacar el jugo de nuestras aportaciones.

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  21. me parece muy acertado este post ya que hoy en día los niños/as se educan para creerse o ser el /la mejor de la clase cuando lo importante es que los enseñen a sacar lo mejor de ellos mismos mientran comparten conocimientos e ideas con los demás en forma grupal y planteandose nuevas situaciones.

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  22. Muy bonito. ¿Os imaginais tratar a todo el alumnado igula? Les proporcionariamos actividades personalizadas, retos, sin descuidar su lado emocional, colaborando con la familia, darles alas. No se si estamos preparados para asumir que todos podemos alcanzarlo todo si nos ayudan. Claro, con determinadas personas y en determinados entornos, posiblimente en un motento concreto, esto es más facil y, por qué no, vamos a aprovecharnos de ello y les vamos a atender mejor, porque vamos a sacarles más rendimiento con menos esfuerzo.
    Un razonamiento empresarial en este sentido es que, estas personas con altas capacidades, son más rentables.
    Creo que la escuela debería de estar por encima de todo eso. No hay que negar que determinadas personas pueden desarrollar talentos con más facilidad por alguna razón que desconocemos. Lo que si voy a afirmar es que si la escuela destinara tantos recursos a conseguir desarrollar a cada alumno de igual manera, lograría, sin duda, que éstos alumnos desarrollaran conductas propias de lo que hoy consideramos niños y niñas con talesnto o con altas capacidades.

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  23. Repasando las recomendaciones pedagógicas que se extraen de la investigación publicada en la revista Nature para educar a jóvenes con talento, no encuentro ninguna diferencia con las sugerencias indicadas para la educación en general, por tanto, pienso que estas son perfectamente aplicables al resto de alumnos. En este sentido, creo que los objetivos y el protocolo en la educación deben ser los mismos, aunque contemplando y dando una respuesta adecuada a las necesidades individuales del alumnado. A mi parecer, los niños con altas capacidades también necesitan un ambiente normalizado para desarrollarse emocionalmente sin la presión ni la competitividad que caracteriza a las “escuelas de genios”, porque como dice J. Aldecoa, “lo más importante no es ser el mejor, sino sacar lo mejor de uno mismo”. Una vez sentadas estas bases, todo se irá desarrollando de acuerdo a las capacidades intelectuales y a las ambiciones de cada cual.

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